. About Herman Van Ingelgem by David Ulrichs
Herman Van Ingelgem (1968) crea espacios imaginarios a partir de metonimias arquitectónicas y nos propone vivir en ellos. Los elementos arquitectónicos se ensamblan en formas que parecen naturales, per que, reflexionado, no tienen sentido. Así, coloca una lámpara detrás de una cortina de ducha, o una barra de cortina delante de una lámpara de pared ; cirra la distancia normal entre un perchero y una lámpara de techo, o entre un respiradero, una tubería de radiador y una lámpara de techo. Al colocar estas situaciones parciales detrás de un cristal, como en sus Flightcases (2003), le resta valor a su incoherencia, precisamente al mostrarla - debemos recordar que mostrar es siempre también ocultar -. La familiaridad del espectador con los objetos individuales y con su distribución general es incluso restablecida por la posición general de las piezas. Sin embargo, a pesar de la ineficacia inmediata de nuestra mirada para captar lo que realmente está ocurriendo, Posteriormente, recordaremos estas imágenes, volveremos a las piezzas y nos daremos cuenta de que el espacio en el que nos encontramos solo existe en nuestra mente.
Sus propuestas pictóricas de estructuras arquitectónicas son meramente lugares sugerentes, edificios parciales. De forma similar, sus instalaciones reúnen incontables objetos parciales forzando al espectador a hacer la mayor parte de trabajo de recontrucción mentalmente. Si bien lo que vemos no es desconocido, las cosas no estaán hechas con los materiales usuales. Así, un televisor y un equipo estéreo están hechos con contrachapado, una proyección luminosa en una pared está simplemente pintada y una bota Wellington está confeccionada con hormigón. Estos objetos han sido despojados de sus funciones y de su valor de cambio, mostrando, sin embargo, su valor de uso com evocadores de objetos y espacios en nuestra imaginación creativa.